Fuera excitantes, dentro la calma.


5- Elimina los excitantes y adicciones: Café, té y refrescos de cola alteran el sistema nervioso de la persona y son altamente adictivos.

Una de las claves para la calma y el equilibrio nervioso es eliminar los factores físicos externos que alteran el sistema nervioso. En otras palabras no tomar no tomar excitantes, drogas o sustancias adictivas.

Entre las principales sustancias excitantes del sistema nervioso encontramos el café, los refrescos de cola, el té y el chocolate. ¿Cual es el motivo de tomar excitantes? Basicamente dos a parte de los motivos sociales o falta de personalidad: la busqueda de sensaciones agradables y la necesidad de un extra de energía. Ambos se deben a que la persona nota carecias, que trata de llenar con algo externo.
Sin embargo estas sustancias, ni aportan la felicidad, ni aportan un extra de energía. Simplemente constituyen un chute temporal, como el café de la mañana que te levanta el ánimo y luego te baja, de ello que la persona necesite de nuevo otra dosis de excitante y lentamente va aumentando el numero de cafes diarios, y así deviene el tomar café en adicción.


Todos estos productos tienen una misma sustancia alcaloide que afecta al sistema nervioso: la cafeina. La cafeina provoca una sensación de euforia y de fuerza durante algunas horas, que producen este estado de "mas actividad", "bienestar" y "estar a tope". ¿Como? Simplemente anula las ordenes de calma y tranquilidad, que otros transmisores del cerebro realizan. Al mismo tiempo activa los excitantes naturales del cuerpo: adrenalina y noradrenalina, que mantendrán a la persona despierta y activa, por la activación del sistema de estres.

El primer efecto de los excitantes con cafeina es evidente, activa el estrés, elimina la calma. Con lo cual es paradojico que alguien diga que el cafe le calma. A poco que razonemos veremos también que la persona tiene un sistema nervioso con plenas capacidades y que la cafeina al parecerse a algunos de las sustancias (los neurotransmisores) del cerebro activa o frena algunas de estas funciones. En otras palabras el cerebro tiene sus propios excitantes y drogas internas. Por ello cuando alguien ingiere los excitantes externos, el cerebro se vuelve cada vez más inutil, y depende cada vez más de esas dosis externas. Lo que la persona nota no es que el café le calme, que va, sino que le falta algo. Hay quien está tan acostumbrado al rudio y el frenesí que no soporta la calma y el silencio de la naturaleza. No es que tomando café uno se sienta mejor, sino que al volverse habitual uno se siente mal si no lo toma.

Tambien los refrescos de cola, son ya verdaderas plagas que se extienden por todo el mundo. Y hay quien practicando yoga, o queriendo dejar el café, se pasa al té porque piensa que es más sano, o más fashion. "La teina es más natural" dirán, pues no hay tal cosa como la teina, la teina es la cafeina del te, es decir la misma sustancia química.

La idea del yoga es siempre la busqueda de libertad y de un bienestar basado en la autonomia, para ello es necesario aprender a generar las causas dentro de nosotros, para no tener que estar pendientes de lo externo. Yoga es una ayuda para dejar adicciones porque restablece el equilibrio nervioso y produce sensaciones de bienestar, pero siempre es la persona es la que tiene que cortar.

La gente busca terapias antiestres, acude a clase de yogas, e incluso toma calmantes, y somniferos; pero luego toman café, té y demás sustancias que alteran el sistema nervioso. ¿Que quiere la persona? Lo primero en la vida es aclararse, luego acutar en consecuencia. Si nuestras acciones no estan de acuerdo a nuestras intenciones y pensamientos, cosecharemos los frutos opuestos a las mismas, y a demás es muy posible que la persona se sienta frustada. Por ello es muy importante que la persona arregle su vida de forma integral, para que pensamiento, sentimiento y acción sean fuerzas que apunten en una misma dirección.