La vida de un yogui es un libro de Sabiduría abierto para aquellos que se acercan a ellos con anhelo de vivir el yoga. Entre los mejores libros de yoga a la venta están las autobiografias de los grandes personajes que han marcado la historia del yoga en occidente. Paramahansa Yogananda con su Autobiografía de un Yogui marcó un antes y un después en la concepción del occidental sobre el yoga.Nos encontramos ante una de las autobiografías mas apasionantes, Paramahansa Yogananda nos relata su vida en la india y posterior viaje a Estados Unidos a difundir el yoga, y la experiencia mística de Dios. Se trata de un libro fácil de conseguir en internet, o en cualquier librería especializada, incluso en grandes centros comerciales, ya que ha sido reeditado numerosas veces (más de diez) y es ampliamente conocido.
Resulta una lectura muy enriquecedora, en la que se muestra la vida de un yogui, desde su niñez y sus primeros intentos de huir a las montañas hasta sus últimos días. Sin duda los pasajes mas interesantes son todas su aventuras en su país natal, donde conoce distintos santos y yoguis que parecen estar sacados de un cuento de ficción, sus intentos de viaje a la nivosa cordillera del Himalayas, el encuentro con su Gurú, los relatos sobre Babaji, aprendizaje de Kriya Yoga, las enseñanzas recibidas en el ashram de su Gurú. Termina la lectura explicando como Yogananda comía fresas con nata, teniendo visiones, engordando y destrozando el páncreas hasta que abandonó el cuerpo físico, tras lo cual su cuerpo se mantuvo incorrupto durante días.
A lo largo del libro hay numerosos pasajes sobre las experiencias espirituales del autor y su Gurú, la persona sensible podrá intuir la verdad en estas palabras. También de enseñanzas y filosofía yogui, aunque marcada por el intento de adaptarse a la religión cristiana de occidente y su concepto de Dios. También hay varias páginas con fotos e ilustraciones de Yogananda, su Gurú, y otros personajes o lugares que son nombrados en el libro. Una muestra de lo que fue el camino de Yogananda, aunque leer libros nunca será suficiente para acercarse a Dios ni a la experiencia de yoga.
