Yoga y curación del asma.

La práctica de asana y pranayama es la mejor forma de conservar una salud de hierro. Gracias al hatha yoga se pueden activar zonas del pulmón que habitualmente están inactivas, y donde tiende a acumularse un aire donde nunca hay recambio pulmonar. También muestran los estudios realizados en las instituciones de yoga en la India de que tiene el hatha yoga un éxito impresionante en la mejora de asma. Por ejemplo, un estudio de 255 personas con asma encontró que el yoga ayudó en la mejoría o curación en el 74 por ciento de los pacientes con asma. Otro estudio de 114 pacientes tratados durante un año por el yoga encontró una tasa de 76% de mejoría o curación y que por lo general los ataques de asma podrían prevenirse con métodos del yoga sin necesidad de recurrir a medicinas o drogas externas.

Otro estudio de la India reclama una tasa de 93 por ciento de mejora en un período de 9 años. Ese estudio encontró mejoría fue vinculado el yoga físico con un procedimiento de meditación, además de una postura sencilla y pranayama. La práctica del yoga supuso una mayor reducción de las puntuaciones de ansiedad. Se cree que la práctica del yoga ayuda a los pacientes a respirar mejor y a tomar las riendas de su propia vida, aprendiendo a ser autónomos y encontrar nuevas formas de respirar. Al tiempo que se aumenta la autoconciencia.

Un estudio de 46 adolescentes con asma encontró que la práctica del yoga como resultado un aumento significativo de la función pulmonar y la capacidad de ejercicio y dio lugar a menos síntomas y medicamentos. El mantenimiento de posturas corporales del yoga (asana), y las prácticas de pranayama son el fundamento de las salud. Los pacientes recibieron entrenamiento diario en el yoga de 90 minutos en la mañana y una hora en la noche durante 40 días. En este caso la práctica de los procedimientos de yoga incluía la limpieza con las kriyas de Kundalini Yoga.